No sé si esto que me pasa es característica de las personas creativas o pasa a todo el que tiene ciertas inquietudes sean o no del mundo creativo.
El caso es que mi cabeza va mucho más deprisa de lo que mis manos pueden trabajar y esto además de acelerarme es bastante frustrante.
Mi cabeza a cada paso que doy se encuentra con miles de cositas que la estimulan y no puede parar de pensar en crear, fabricar, reparar, tunear... a veces resulta tan acosadora que no me permite el descanso que tanto se necesita...me levanto pensando en el día que voy a tener, relajada, con 24 extensas horitas que dan para tanto y en cuanto pongo el pie fuera de la cama ya estoy acelerando motores para que me de tiempo llegar a todo.
Al margen de la vida familiar, que todos tenemos y bastante tiempo nos ocupa, está mi vida interior que me lleva bastante más...
Si hace falta leche y harina ya pienso que tengo que hacer la compra y que con esos ingredientes tengo que hacer ese bizcocho que ví en el dominical , que lo presentaba no sé qué modelo que además llevaba una camiseta ideal que me apetece hacer tuneando esa blusa que no me pongo de puro sosa que es. Además recomendaba una novela que acaba de publicar ese autor que me cae requetebién y del que leí una crítica buenísima en Facebook la semana anterior...uy...el señor Facebook, qué peligro!!!!
Aprovecho para enseñaros alguna idea para almacenar esas revista que se resisten a irse a la papelera.
(vía pinterest)
Además en ese dominical, o no se, en uno de tantos que caen en casa los fines de semana, había un anuncio preciosísimo con una fotografía... es un reto la luz que tiene...tengo que probar hacer algo parecido porque no debo abandonar el tema fotos ahora que tengo el objetivo que tanto ansiaba tener!
Recomendaban también la exposición en el Prado, Meta pintura, que durará 4 meses , pero yo tengo que verla en la primera semana no vaya a ser que roben algún cuadro y me quede sin verlo... a ver si a algún pintor refleja mis ansiedades.
Y la decoración navideña...cada año intento hacer adornos nuevos reciclando papeles, maderas, lanas, hilos, frascos...qué se yo! Me convierto en el mismísimo Diógenes... Sólo me faltaban a mí las luces de colores intermitentes luciendo allí por donde pasas... bueno lo de la decoración con lucecitas es que me encanta! Este año sin falta tengo que probar a fotografiar los arbolitos para conseguir el tan ansiado bokeh!!!
Este año hago este corazoncito sí o sí!! ( pinterest )
A todo esto, el niño que te dice que tiene que presentar una foto o un christma para el concurso del colegio y le tengo que ayudar porque este año se lo ha tomado en serio o el otro que te pide que le enmarques los recuerdos de su pasado Camino de Santiago y lo quiere colgar sin falta esta semana en la habitación...
Esos encargos que llevo atrasados y que de verlos encima de mi mesa de trabajo y que empecé a bocetar con tanta ilusión ya me aburren y pasan los días y se van acumulando uno encima del otro...
Y ya os dije que no comentaría las obligaciones familiares de tener que hacer análisis a toda la familia, o reuniones tediosas , salidas imprevistas con cierta urgencia que desbaratan no sólo el día sino la semana, o todo el mes!!!!
Es o no una locura mi cabeza???
Y mientras mis pinceles, acuarelas y óleos cogen polvo encima de esa mesa que se llena de papeles para archivar . Todos los días me despiertan y me hacen levantar de la cama pr no llega el día que me despidan y me manden ellos a dormir...
vía pinterst
No hay libro de Marie Kondo que arregle esto, os lo aseguro.
Ojalá , ordenar las cabezas fuera tan sencillo como poner orden en una librería o en una mesa ;)
De momento me voy a poner a cocinar que la chica que trabajaba en casa se ha marchado sin decir adiós y ha floreado mis aburridos días... ;)
Esta tarde sin falta me pongo con esa ilustración que llevo meses pensando en hacer porque sí, porque me apetece hacerla....no hay encargo que la pise!!!... además de poner orden en el cajón de las bolsas bonitas que tengo que reciclar las asas de algunas porque son tan especiales esas cintas... y las croquetas con esos restos del pollo que sobró el otro día, además de colocar ese armario, que le ha quedado pequeña toda la ropa a mi pequeñín y si me da tiempo la llevaré a casa de mi hermano que la recibe con los brazos abiertos para sus peques, así me tomo un café con ellos que hace mucho que no nos vemos. Voy a ver si les llevo un tupper con mis croquetas...
Eso sí, no quiero ni debo perder la sonrisa y el buen humor...